lunes, 13 de junio de 2016


Kairosclerosis, el momento en el que te das cuenta que eres feliz.

<<Llego y me tiro a la cama a las 3 de la mañana, muerta, con la cabeza aún dándome algo de vueltas debido al alcohol. Mañana tengo que levantarme a las 7 y media porque tengo clase, pero me da igual. Estoy en época de novatadas, y es lo que toca. Recuerdo la noche de hoy, como he salido en leggins y sudadera, hecha un asco, y me daba igual. Como he bebido alcohol asqueroso de un euro y no he muerto en el intento. Como he cantado con una chica My Chemical Romance en mitad de un barullo de gente y me ha dado igual quien nos estuviera mirando. Como he representado una escena de El Señor de los Anillos en mitad de un botellón. Como he ido a declararme a uno sin tener ni idea quien era con las palabras “atril”, “rotulador” y “váter”… Saber que al día siguiente tengo clase, tengo que coger apuntes y no voy a poder porque la resaca me va a estar matando. Pero me da igual. Que estoy en Madrid, empezando la carrera que pensé que nunca llegaría a estudiar. Que he encontrado personas con las que puedo ser yo, que nunca pensé que iba a encontrar. Que soy quien soy por primera vez en mi vida. Y justo en este preciso momento me doy cuenta que soy completamente feliz. Siempre había sentido que me faltaba algo, pero no ahora. Todo estaba tal y como tenía que estar. Y me dormí, cuando este sentimiento se desvanecía poco a poco>>.

Y esta fue la primera vez que sentí lo que luego encontré que tenía nombre, kairosclerosis. Después de ya casi 18 años había podido sentir que era feliz. Antes siempre había algo que me impedía disfrutar al 100%, inseguridad por mi cuerpo, por mi personalidad, por quién era… Pero en los últimos años había trabajado en ello, y ya nada podía impedírmelo.

De ahí nació esta idea. Caí bajo, luché una batalla que desde el principio pensaba que iba a perder. Pero no fue así, gané, y me alcé más fuerte que nunca. Comprendí que las cosas que consideraba importantes antes no lo eran, y que tenía que establecer mis prioridades, que la sociedad te “lía”. Puse mi felicidad en un cuerpo imposible, en una imagen inexistente, en alguien que no era yo; y así nunca podría ser feliz, al contrario, era miserable, porque por muy fuerte que lo intentara nunca llegaba a ser suficiente. Cuando cambié la felicidad en mostrarme como soy y darme cuenta que así soy aceptada, todo cambió. Y cuando fui consciente de ello, me di cuenta cuanta gente no sabe esto aún.

Siempre quise hacer algo respecto a ello, no sabía como. Se me ocurrió crear un blog. No pretendo salvar el mundo, ni si quiera sé en que dirección va a ir. ¿Satisfacer simplemente mi gusto por escribir y expresar mis pensamientos? ¿Tratar de ayudar con lecciones que he aprendido en estos últimos años? ¿Combinar las dos cosas? No lo sé aún. Pero lo iré viendo con el tiempo.

Esto es kairosclerosis. Esto es seguridad, positividad y amor hacia ti mismo. Cómo esto sí es posible.


PD: kairosclerosis no es una palabra real, fue inventada por alguien, por eso yo le tengo mi propia interpretación. Creo que el significado real es que después de darte cuenta que eres feliz, eres infeliz. Yo lo interpretó más que esa sensación se desvanece, pero sé te queda la bonita sensación de que fuiste consciente del bienestar, porque eso es lo que yo he sentido. Si queréis saber más de esta palabra está en The Dictionary of Obscure Sorrows.

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